El colágeno actúa como sostén de las fibras de la piel, dándoles consistencia, flexibilidad y resistencia.
Sin embargo, con el paso del tiempo su producción va disminuyendo, provocando la aparición de líneas de expresión, resequedad y flacidez facial.
Al aportar un extra de colágeno, le regresamos a la piel, firmeza, elasticidad y juventud.
¿Cómo usar? Aplica un par de gotas sobre tu piel limpia, distribuye suavemente con los dedos y deja que se absorba por completo. Utiliza diariamente en la mañana y noche.